REFLEXIÓN 11 (LA MUERTE)
La muerte con su guadaña se pasea entre nosotros como segador en campo de trigo.
No siempre da de lleno, algunas, las menos, sólo roza dejando mal herido al que de esa suerte goza.
La vida es una continua renovación, los más viejos se van, los jóvenes los sustituyen. ¡Ojala fuera siempre así! Pero ni siquiera esta regla la respeta; te espera en la carretera, en la feria, en la playa, arreglándote en casa, no le importa el sitio, no respeta edades, ni sexos, ni religiones , más tarde o más temprano te sorprenderá la parca.
Que mal juego el de la vida, que sin ninguno querer, todos entramos en el bombo y respiramos tranquilos cada día que pasa sin ser elegidos.